Las pérdidas acumuladas en el negocio del cemento portland alcanzan los 760 millones de dólares desde el año 2000, según informó el Directorio de Ancap al Parlamento.
Cemento: un negocio que Ancap acumula USD 760 millones en pérdidas desde 2000
Las autoridades de la empresa concurrieron a la Comisión de Industria del Senado para informar sobre la decisión de buscar un socio privado para la producción de portland.
El pasado 10 de agosto, las autoridades de Ancap concurrieron a la Comisión de Industria del Senado para informar sobre la decisión de buscar un socio privado para la producción de cemento portland.
De acuerdo a las cifras brindadas al Parlamento, las pérdidas acumuladas corresponden a 433 millones de dólares en pérdidas operativas y 328 millones por la pérdida de valor de todas las inversiones realizadas. Esto representa una cifra mayor a la capitalización realizada en Ancap en el año 2015.
Con un mercado local de menos de un millón de toneladas por año, el directorio analizó que hay una competencia muy fuerte a nivel regional con precios más competitivos. Entre Argentina, Brasil y Paraguay se consumen casi 75 millones de toneladas por año con una capacidad de producción por más de 130 millones de toneladas. A esto se suma, que las empresas privadas instaladas en Uruguay tienen en cada planta una capacidad de producción similar a las plantas del ente en Minas, Paysandú y Manga.
Otro argumento impulsado por el oficialismo para asociar a Ancap en este negocio, es la imposibilidad de hacer inversiones para modernizar las instalaciones de producción. Solo para reacondicionar e instalar el horno comprado en 2014 para Paysandú se requieren como mínimo 116 millones de dólares.
Ancap informó a los senadores que la asociación será por el 30% y que a su vez el ente se asegura el 30% de las ganancias, se obliga al socio a inversiones, se mantiene la propiedad y el derecho a explotación de la materia prima. Además, se fija una multa de 15 millones de dólares más el valor de las acciones en caso de incumplimiento del socio. Con respecto a los trabajadores se busca contemplar la situación de los casi 500 funcionarios, promoviendo la contratación de la máxima cantidad por parte del socio y dar opciones para incentivar el pasaje a la nueva empresa, permanecer en el Estado, renunciar, jubilarse o reservar su puesto en Ancap.
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